Trabajar desde donde sea

Tuve la fortuna de estudiar Comunicación Social y es una carrera que amo tanto que sin duda de volver a nacer no dudaría ni un segundo elegirla nuevamente. Inicialmente cuando ingrese lo hice porque me llamaba mucho la atención trabajar como reportera, desde la calle y cubriendo hechos de tensión donde me tocara poner en practica grandes habilidades.

Comunicadora integral y trabajo
desde donde sea

Vengo de una familia muy influenciada por los medios de comunicación y las artes, mi padre locutor, mis hermanos fotógrafos, tíos escritores y poetas, entre otras profesiones y oficios que me fueron enamorando; sin embargo, una vez dentro de la escuela de comunicación social descubrí otras vertientes también muy fascinantes; así me enamoré de la producción audiovisual.

Como siempre estuve ligada a la comunicación tuve oportunidad de estar en programas de radio, redactar algunos artículos para medios impresos, también diagramar y diseñar, en esta carrera se aprende de todo un poco, pero antes de graduarme me inicié en la gerencia de medios y es así como llego a la Coordinación General del Teatro Ateneo de Maracay. Esta para mí fue una maravillosa experiencia porque como bailarina este lugar significaba mucho para mí, mi tesis fue una reconstrucción historia de este espacio y aquí me toco poner en práctica muchas cosas de mi carrera que fui adaptando al lugar donde me encontraba. Esta fue creo que la primera vez que me tocaba explicarle a algunas personas por qué siendo comunicadora trabajaba en un teatro; las personas solo ven lo evidente pero no van más allá, este espacio como cualquier otro organismo o empresa, necesitaba darse a conocer, mantener informado al colectivo lo que allí ocurre, muchas veces las agrupaciones necesitan apoyo difundir lo que hacen, como generar una estética visual acorde y agradable, como construir u organizar un concepto y difundirlo. No son estas tareas que puede hacer un comunicador de hoy.

Sin embargo constantemente me hacían la pregunta “pero tú no eres periodista”, como si yo me desempeñara como biólogo marino; entonces yo en los momentos de mayor paciencia explicaba detenidamente que un comunicador cuenta con una formación integral, que además existen menciones, que uno puede especializarse, etc. Algunas veces entendían, otras no pero yo simplemente seguía mi camino, un camino que buscaba nutrir del mayor conocimiento posible, todos los días aprendiendo algo nuevo y haciendo que la experiencia fuera cada vez mejor.

En busca de nuevas aventuras, me fui a trabajar como productora de campo para una productora nacional independiente y allí pase por muchas cosas, desde trabajo de campo al de oficina como coordinadora de producción, puedo decir que ha sido una de las experiencias más maravillosas de mi vida; cuando produces tienes que ser buen trabajador: responsable, creativo, manejar la presión, trabajar contra el reloj, ser diplomático, hablar varios lenguajes, hasta ser un poco como una madre; toca hacer de todo y eso para mí es fantástico.

Luego de muchas horas de trabajo por largo tiempo decidí emprender un nuevo camino, emocionada, cargada de ideas, tal vez de forma independiente, pero al poco tiempo de estar libre recibí una propuesta para trabajar como periodista asignada del teatro en el cual ya había trabajado, obviamente no dude. Aquí puse en práctica la redacción, diagramación, producción audiovisual y edición, cada vez que enfrentaba un nuevo trabajo tenía más herramientas… la pregunta recurrente de la que les hable anteriormente persistía pero los más cercanos ya entendían, sin embargo, todavía se tiene el viejo ideal de que debes aparecer en televisión o trabajar un periódico para ser comunicador.

Esta fue otra hermosa etapa, pero llega un momento que hay que seguir; realmente supe que lo mío no sería estar frente a cámaras aunque eso en su momento también paso; sentía gran pasión por la comunicación organizativa y me dedique a manejar la gerencia de comunicación de una empresa que a su vez con el tiempo me brindó la gran oportunidad de ser la gerente general de otra organización en un ramo para mi desconocido que me llenó de mucho miedo y dudas pero que finalmente logre asumir y poner en práctica una especialización que hice en Gerencia de Maketing y Ventas.

Esta etapa me hizo madurar muchas cosas y reforzar esa idea de formación integral y sentirme muy orgullosa de mi carrera. Evidentemente cuando me preguntaban mi profesión y luego donde trabaja las personas no entendían la relación pero yo mantenía y mantengo mi posición; este ha sido un tema hasta de discusión familiar ya que algunas personas se sienten “preocupadas” porque no trabajo en mi profesión; cosa que realmente yo ya se con quienes no debo discutir.

Ahora he decido emprender una nueva etapa, bueno hace ya algunos meses y es que esta era 2.0 se ha apoderado de todo y ahora hasta los emprendedores más pequeños hacen uso de las redes para salir de la inexistencia y dar a conocer sus productos o servicios. Es difícil hacer entender aquello de que “eres tu propia marca”, yo me considero una marca y debo manejarme como tal, mi profesión y las experiencias vividas refuerzan mi idea de que no necesito una oficina (espacio físico) o una organización (empresa tal o cual), para hacer lo que me gusta. Que mejor que unir esas experiencias para brindarles a otros la oportunidad de acercarse a las personas a través de los diferentes medios de una forma planificada, honesta, directa, desde sus bondades y adaptadas a su realidad. Soy Comunicadora Social, trabajo independiente y mi trabajo es ayudar a las personas u organizaciones a lograr su misión organizacional a través del marketing 3.0 y lo mejor es que puedo trabajar desde donde sea.

Si quieres puede, ¡solo acciona!